lunes, 8 de agosto de 2011

¿Existe el destino? Las Nornas. Conceptos de Örlog y Wyrd


Muchos paganos creen que su destino está escrito desde su nacimiento, determinando toda su existencia, de manera que son simples marionetas de lo que otros han elegido para él. Otros, en cambio, creen que su destino depende de ellos mismos y forjan con sus manos su propia historia. ¿Cuál de estas dos visiones es más correctas en el mundo Ásatrú? Esta entrada pretende responder a esa pregunta.

Las Nornas son tres disas (espíritus femeninos) que viven a los pies del árbol Yggdrasil, y tejen el destino del universo. Cada hilo es un individuo, y su longitud es el tiempo de vida de éste. Ellas deciden todos los acontecimientos, sin intervención de los dioses, que también quedan a su merced en un tapiz que les prohíben ver.
De forma que todo, cada objeto o ser animado de este mundo, está relacionado en una sola 'red' de hilos que se entrelazan y separan constantemente. Y por supuesto, la vibración de cada hilo moviéndose llega todos los demás. Es decir: todo lo particular afecta a lo global. Nuestras acciones repercuten en todo lo demás, y por tanto vuelven a nosotros. Esta red es Wyrd.
Pero volvamos a las Nornas: me dejé decir que se llaman Urd, lo que ha ocurrido, Verdandi, lo que está ocurriendo, y Skuld, lo que debería suceder. Ojo a esa última, no dice lo que sucederá, ni lo que debe suceder, sino que habla en condicional: el destino fijado por las Nornas no es inamovible. Y es aquí donde entra el concepto del Örlog.
Ör, principio, Log, ley, es la ley cósmica. Lo venidero es creado en el pasado, no de forma espontánea; nuestras acciones pretéritas pueden afectar en nuestro presente y futuro. Es decir, no hay nada aleatorio, sino que todo 'es' debido a algo que lo causó. De esta manera, no hay idea de predestinación: cada uno elije su propio destino con sus acciones.
Wyrd y Örlog nos hablan de las consecuencias de nuestros actos, y si sintetizamos los dos conceptos nos daremos cuenta de que tanto nuestras acciones personales como interactuando con el exterior determinarán nuestro destino, el cual no está escrito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario